El 12 de marzo de 2020, tras el brusco retroceso del mercado, muchos inversores empezaron a preguntarse por las razones de esta caída. Se puede decir que hay varias razones detrás de este declive. Se sabe que la primera de estas causas, que es el motor de las demás, es el coronavirus , que ha mostrado sus efectos a escala mundial.
Los países que experimentan una contracción económica con el coronavirus han tomado muchas medidas contra la epidemia, pero con la propagación, muchas empresas de producción y distribución han tenido dificultades. El inversor, que tenía un cuello de botella en la gestión del flujo de caja, empezó a retirarse de los mercados financieros. La situación, que aumentó su gravedad tras la decisión de CME de cerrar la oficina en Chicago, provocó una fuerte presión vendedora sobre las criptodivisas. A raíz de esta situación, que se considera una de las razones que aumentarán la presión vendedora, se liquidaron grandes posiciones largas en futuros en el mercado de criptodivisas. Parece posible pensar que la razón principal de este retroceso, que se observa simultáneamente en el mercado bursátil y en el de materias primas, sea la huida de los activos de riesgo con el coronavirus y el flujo de efectivo para abrir posiciones en los mercados de derivados.
Como resultado del enfrentamiento mundial , se sabe que muchos países han realizado avances en blockchain y criptodivisas. En circunstancias normales, cabe esperar que estos avances tengan un impacto positivo en el mercado de la criptomoneda a medio plazo, pero en este momento hay que vigilar de cerca las condiciones económicas de los países. Tras la posible relajación de la economía, cabe esperar un efecto positivo sobre los activos de riesgo y las criptomonedas.
Los expertos advierten de que la economía mundial y los mercados financieros deben vigilarse de cerca durante este periodo. En este contexto, es útil tener en cuenta que el proceso de retirada puede continuar periódicamente a medida que el efecto sea negativo. Dado que la relajación que puede observarse en la economía puede aumentar la transición hacia activos de riesgo, cabe esperar que aumente la reputación y la demanda de criptodivisas, cuyo alcance se detalla con el efecto del virus.